El ámbito de las intolerancias alimentarias se está convirtiendo en un terreno de batalla en el que se enfrentan diversos intereses. Evidentemente, se trata de un tema en el que la competencia de un médico especialista resulta fundamental, pero desde que la tecnología diagnóstica se ha ido simplificando, diversas empresas, farmacéuticos, biólogos, dietistas y otros profesionales, han comenzado a proponer sistemas de identificación de alergias e intolerancias alimentarias. Teniendo en cuenta, sin embargo, que el sistema de recogida a través de la punción en dedo puede ser realizada directamente por el propio paciente, hoy en día la realización del test puede estar ofertada por estructuras diferentes a los laboratorios: SPAS, centros de belleza, centros estéticos, etc. Para comprender este hecho, debemos comenzar con la explicación sobre qué son las intolerancias alimentarias y cómo pueden ser la causa de trastornos que poseen su origen en la incapacidad del organismo de digerir completamente algunos alimentos, que se degradan únicamente a nivel macromolecular, pero no son utilizados por nuestro organismo ni para la producción de energía, ni para favorecer el crecimiento celular.

La acumulación en el tiempo de estas sustancias a lo largo de las paredes intestinales y en el tejido de varios órganos puede ser la causa de procesos inflamatorios. En otras palabras, se trata de una lenta y gradual “intoxicación” que origina diversos síntomas: problemas intestinales, gastritis, retención de líquidos, sensación generalizada de cansancio, cefalea, patologías cutáneas, mialgia y dolor recurrente en las articulaciones, así como trastornos que pueden originar incremento o disminución del peso.

Pero... ¿Cómo detectamos los alimentos que causan intolerancias alimentarias? El sistema MyCare test, desarrollado por un equipo de investigadores universitarios para la organización Micotrace Diagnostici, permite que sea posible llevar a cabo un examen completo con un simple pinchazo en el dedo. La muestra recogida se envía al laboratorio de análisis (Autorización N°176/ 2002 Emilia Romagna), donde expertos biólogos (los cuales han acumulado durante estos años una amplia experiencia en este sector) analizan la muestra del paciente. En dicho centro se organizan periódicamente cursos de formación y perfeccionamiento para profesionales que desean adquirir la técnica necesaria para la ejecución del test. A través del análisis de las modificaciones estructurales de los neutrófilos al entrar en contacto con extractos altamente purificados de los diversos alimentos, se determina eventuales intolerancias y su grado.

Una vez han sido identificados los alimentos responsables de tal fenómeno, será suficiente eliminarlos de nuestra dieta cotidiana por un periodo variable de entre 4 y 12 semanas. La duración del periodo de abstención está relacionado con el grado de intolerancia hallado. La reintroducción de los alimentos específicos deberá ser realizada de manera gradual hasta que nuestro organismo no los reconozca como perjudiciales. En el folleto que se te entregará junto con el resultado del test, encontrarás información e indicaciones detalladas al respecto. Asimismo, en el laboratorio de análisis contamos con un servicio médico con la capacidad de ofrecer dietas personalizadas a los pacientes interesados.

Filippo Testa